domingo, 31 de agosto de 2014

VAYA HERENCIA ME DEjÓ MI ABUELA...

VAYA HERENCIA ME DEjÓ MI ABUELA...

No se a vosotras, pero en mi casa, la mayor herencia que dejó mi abuela, antes de marcharse, fueron las várices. Ni las mujeres, ni los hombres nos libramos de este malestar. Pero en la gran mayoría de los casos, somos nosotras las que más las sufrimos. Muchas permanecemos varias horas sentadas en una oficina y otras tantas, de pie detrás de un mostrador.
He pasado mucho tiempo, tratando de encontrar algún remedio que me aliviase, ya que además del trabajo, el embarazo de mi hija me dejó una gran variz que me da la vuelta a toda la pierna.
No son milagros, pero si nos alivian un poquito.

Las várices son vasos sanguíneos que se han inflamado y retorcido como resultado del daño a las válvulas internas que, por lo general, permiten un flujo sanguíneo apropiado.
Surgen primeramente como una hinchazón seguido a lo largo del curso de las venas acompañado de calambres musculares y una sensación del cansancio detrás de las rodillas.
Con el transcurrir del tiempo, la sangre de las venas se recoge en la parte inferior de las piernas; la piel se pigmenta, conduciendo a la condición que se conoce como úlceras de las varices que es muy dolorosa. 

Entre las principales causas están:

- Estar de pie o sentado por muchas horas
- Embarazos
- Obesidad o exceso de peso
- Usar ropa ceñida

1: Diluir cuatro cucharadas de arcilla verde en una taza de agua. Luego, se debe batir hasta lograr una pasta bastante fluida y se aplica, cada noche, en forma de compresa sobre la parte afectada dejándola hasta que se seque. Luego es necesario lavar con jabón neutro y agua tibia. 
2: Un remedio de la abuela para las várices consiste en machacar cinco cabezas de ajo y colocarlo en un alcohol y pasarlo por las piernas. Además de comer mucho.
3: Igualmente, comer mucho chile dulce en ensaladas y comidas ayuda a combatir las varices, ya que hace la sangre menos pesada y ayuda a la circulación.
4: Una vez empieza a presentarse un abultamiento de las venas, se debe empapar bolitas de algodón con jugo de caqui y frotarlas sobre la parte posterior de las piernas.
5: Aplicar vinagre de manzana sobre las piernas empezando por la derecha de bajo hacia arriba y luego la izquierda de abajo hacia arriba. Se deja puesto por tres horas y después se lava las piernas.
6: Preparar un baño para piernas con várices que incluye 1 puñado de manzanilla, 1 puñado de menta, 1 puñado de laurel, 1 pizca de bicarbonato en2 litros de agua el cual se debe llevar a ebullición, retirar del fuego y después añadir las hierbas por 5 minutos. Se debe colocar la infusión en una palangana; mezclarla con el bicarbonato y dar un baño de pies. En algunas personas este baño puede causar urticaria por lo que se recomienda su empleo con precaución.
7: Introducir las piernas en una bañera, con agua ligeramente fresca, donde se haya añadido 10 gotas de esencia de mente, 5 de limón y 3 de ciprés por 10 minutos.
8: Tomar infusiones de romero con miel y de flores de saúco.
9: Colocar unas gotas del aceite del árbol del té en un paño humedecido en agua fría y, luego, aplicar sobre la zona inflamada por las várices.
10: Frotar las piernas con aceite de oliva y cubrir con arcilla, amasado con zumo de tomates maduros, sin cáscaras ni semillas. Aplicar con gasa. Renovar cada dos o tres horas. Frías en verano, calientes en invierno. 
11: Beber tres veces al día una taza de la infusión de 15 gr de manzanilla, 10 gr de melisa, 10 gr de cola de caballo y 5 g de nogal en un litro de agua durante 10 minutos.
12: Tomar 250 mg al día.de aceite de onagra.
13: Lavar un par de hojas crudas de col con agua de fresca a fría y machacarlas. Aplicar directamente, en forma de cataplasma, en las áreas afectadas y dejar puesta durante 15 minutos.
14: Macerar 2 cucharadas de aceite de oliva, el jugo de un limón y 6 dientes de ajo picados por 12 horas. Aplicar mediante un suave masaje circular ascendente por la mañana y la noche. 

Recomendaciones

-Aumentar la compresión mediante medias especiales Existen medias con ajuste de compresión especiales o de soporte para las várices, que a diferencia de las comunes, ayudan a evitar que la sangre se vaya hacia las venas más pequeñas y cercanas a la piel. Lo que da un alivio considerable a las piernas.

- Mantener las piernas en alto. Debido a que las várices son venas debilitadas sin la fuerza que tuvieron antes para devolver la sangre al corazón, es necesario ayudarlas. Por ello, se recomienda elevar las piernas por encima del nivel de las caderas y apoyarlas sobre un sillón o unos cojines. Igualmente, debes mantenerlas altas a la hora de dormir mediante unas almohadas.

- Mover las piernas Las várices surgen debido a una vida sedentaria. Si en el trabajo se está sentada durante muchas horas, se debe dedicar dos minutos, cada media hora, a mover los dedos de los pies dentro de los zapatos y extiende las piernas. También es conveniente caminar un poco cada hora.

- Colocar un cajoncito para descansar los pies Si se estará por mucho tiempo parada, como por ejemplo, cuando se está planchando, se debe colocar en el suelo un pequeño cajoncito para que ahí descanse un pie y luego el otro.

- No usar ropa ajustada ni doblar las piernas No usar ropas muy ajustadas (como los vaqueros) ni fajas elásticas. Prefiera prendas amplias y de tejidos naturales que dejen a la piel transpirar. Tampoco, se debe cruzar, al estar sentada, las piernas, ya que todo ello dificulta la circulación adecuada de la sangre lo que propicia la aparición de várices

- Practicar ejercicios Caminar o nadar de 30 a 45 minutos al día son ejercicios ideales para las personas que tienen várices, ya que contrae las venas, se vacíen y se envíe la sangre hacia el corazón.

- No tomar anticonceptivos orales Si se sufre de várices, no se recomienda el consumo de anticonceptivos orales, ya que pudiera aumentar los problemas de circulación periférica.

- Evitar exponer las piernas a un calor excesivo Las piernas no deben estar expuestas a calores como las de las estufas, calentadores o la exposición excesiva al Sol. 

- Evitar el estreñimiento, ya que, al ejercer presión, dificulta la circulación de las piernas.

- Mantener un peso adecuado. Es importante mantener el peso adecuado, ya que si se engorda se recarga las venas de las piernas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario